El mantenimiento de una piscina es muy importante para garantizar la salubridad del agua y el correcto funcionamiento de la piscina.
Ya sea invierno o verano, tanto si nos podemos bañar como si no, es necesario realizar una serie de rutinas imprescindibles para poder disfrutar de la piscina en verano. Este mantenimiento básico permite controlar los niveles de pH y cloro, pero, sobre, todo, favorece la preservación de todas las instalaciones que nuestra piscina necesita para su correcto funcionamiento.
Vamos a estructurar el artículo en función de si tenemos que realizar las tareas de manera habitual (diariamente y semanalmente) o puntual.
Mantenimiento diario de la piscina
Hay una seria de tareas que tendremos que realizar todos los días, o casi todos. La más importante es analizar el pH del agua y ajustarlo a los niveles adecuados.
Además del pH, tendremos que regular los niveles de cloro, ya que, como el pH, es fundamental para disfrutar de un agua limpia y saludable.
Por último, diariamente también habrá que recoger las hojas y demás restos de suciedad que, debido al viento o a la proximidad a zonas verdes, tienden a ensuciar el agua de la piscina.
Mantenimiento semanal de nuestra piscina
A pesar de que recojamos las hojas todos los días, la suciedad también se deposita en las paredes y el fondo de la piscina. Por ello, es importante que nos habituemos a usar el limpiafondos al menos una vez por semana.
Del mismo modo, es necesario que limpiemos los skimmers, lugar donde se acumula también el polvo y la suciedad. Y, por supuesto, hay que limpiar todas las semanas el filtro y el prefiltro de la bomba. La suciedad del agua y los skimmer acaba allí. Un filtro sucio y obstruido no hará bien su trabajo y pondrá el riesgo el correcto funcionamiento de la bomba. Por eso es importante limpiarlo habitualmente.
Para limpiar el filtro y el prefiltro, habrá que realizar un contralavado para expulsar al desagüe la suciedad allí acumulada. Es importante que seguimos los pasos para realizar este lavado a contracorriente, desactivando la bomba y seleccionando la opción contralavado.
Si nuestra piscina emplea filtros de cartucho, solo será necesario extraerlos y limpiarlos con abundante agua.
Para finalizar con las tareas semanales, tendremos que verter la dosis necesaria de alguicida para que el agua no se ponga verde y aparezcan restos de moho y bacterias en las paredes de la piscina.
Mantenimiento puntual
Cuando decimos puntual nos referimos al hecho de que se hace de manera concreta bien para preparar la piscina para el verano, bien para proceder a su invernaje, bien porque vayamos a hacer uso de ella por primera vez.
En cada caso, los pasos a seguir son muy similares. Por ejemplo, para usar la piscina por primera vez tendremos que realizar una cloración de choque y emplear antialgas concentrado. Por su parte, si vamos a preparar la piscina para el invierno, además de la cloración de choque, habrá que dejar el filtro funcionando entre 8 y 10 horas con el antialgas y el líquido invernador de piscinas.
Tener una piscina en casa exige llevar a cabo estas tareas para disfrutar del baño sin riesgo para nuestra salud, además de que reducimos la posibilidad de que haya problemas de funcionamiento o averías.
Comments